lunes, 27 de abril de 2015

La última canción de Keats

La última canción de Keats

Quiero acostarme contigo
Bajo un cielo estrellado.
Que seas mi Luna y yo Endimión.
Aullarte en soledad sin más piel
que la piel del deseo;
sin más eco que el susurro
de las esferas que titilan
destellos desbordantes de amor.

Necesito mirar a las cuencas
Donde flota el no-tiempo
Y atreverme a sumergir
El álgido de lo que siento.

Veo dibujadas en tu rostro
Las heridas de quienes no
te merecieron. De soslayo
Asoma el refulgente brillo
De lo que ocultas.

Lobreguece la esperanza,
Alborece la duda.
Tu deriva huye de mis pasos,
Inalcanzable…

Y aunque seas Luna y yo Endimión,
Como lobo azul te rondaré cada noche;
Correré tras tus huellas de día, incasable.
Seré una causa perdida
A tus ojos de tormenta de arena.

Tal vez apareceré más allá
Sin los grilletes, sin la tupida
Furia de la bestia solitaria.

Y quizás sea entonces cuando
Me acojas por fin en tu manto,
Circundado de mágicas estrellas.
Y las garras caerán,
Y solo quedará Plutón.
Y Luna y Endimión se unirán
En un cosmos indestructible…